Juan David Vargas Mora

El programa soviético Sputnik superaba en varios aspectos a su análogo norteamericano Vanguard; pues no solo fueron los soviéticos los primeros en ponerse en órbita, sino que además, el Sputnik 1 pesaba casi 200 libras, mientras que el primer satélite que planeaba lanzarse en el programa​ ​Vanguard,​ ​solo​ ​pesaba​ ​3,5. Antes de que pasaran los efectos del Sputnik 1, la Unión Soviética atacó de nuevo: el 3 de noviembre de 1957, menos de un mes después, se lanzó el Sputnik 2, con una perra a bordo: Laika, el primer ser vivo terrestre en viajar al espacio. El Sputnik 2 pesaba 1120 libras y estuvo en​ ​órbita​ ​por​ ​casi​ ​200​ ​días. Durante la crisis provocada por el Sputnik, ​Wernher von Braun y su equipo, ahora trabajando para los Estados Unidos, llevaron a cabo el lanzamiento del Explorer 1, desde Cabo Cañaveral, Florida, el 31 de enero de 1958. Los datos recolectados por este primer satélite norteamericano permitieron confirmar la existencia del campo magnético de la tierra y el descubrimiento de lo que​ ​más​ ​tarde​ ​vendría​ ​a​ ​llamarse​ ​Cinturones​ ​de​ ​Van​ ​Allen. Durante este periodo, el Proyecto Vanguard recibió financiación adicional que permitió acelerar su desarrollo, lo que finalmente llevó a la puesta en órbita del Vanguard I, el 17 de marzo de 1958,​ ​confirmando​ ​la​ ​existencia​ ​de​ ​los​ ​Cinturones​ ​de​ ​Van​ ​Allen​ ​y​ ​midiendo​ ​su​ ​gravedad.